El Cuartel de Ballajá tiene un techo verde

Obtenido del Periódico El Nuevo Día / Calidad de Vida 16/5/12

El techo del antiguo edificio alberga 720 placas fotovoltaicas, un estanque y un jardín

Las placas le permiten al Cuartel de Ballajá reducir en un 55% los gastos en energía eléctrica. (Suministrada)

Por Alba Y. Muñiz Gracia / amuniz@elnuevodia.com

El cuartel  de Ballajá esconde secretos que van más allá de sus casi 160 años de historia.

Y es que, a pesar de  los espacios que, en su momento fueron utilizados como calabozos, oficinas y barracas para soldados, la antigua estructura ha dado un vertiginoso salto hacia la modernidad y la tecnología verde.

El secreto está en su techo, que desde hace menos de un año alberga 720 placas fotovoltaicas que generan 151 kilovatios hora y le han permitido al Cuartel de Ballajá reducir en un 55% los gastos en energía eléctrica.

Pero el área no sólo contiene las placas solares, sino que también contiene un colorido jardín en el que crecen plantas de romero y albahaca morada, entre otras, y hasta un pequeño estanque con peces.

El director ejecutivo de la Oficina Estatal de Conservación Histórica (OECH), Carlos Rubio Cancela, explicó los trabajos se iniciaron en el 2011 con el proyecto de eficiencia energética.

Agregó que la  inversión total de $4 millones en fondos del Programa de Reinversión y Estímulo Económico Federal (ARRA, por sus siglas en inglés).

Esto incluyó también el reemplazo de luminarias y trabajos en el techo que ayudaron a bajar la temperatura del edificio.

“La idea de crear un techo verde es devolver lo que el edificio le quita a la ciudad”, expresó el arquitecto Rubio en un recorrido con El Nuevo Día por el renovado techo del Cuartel de Ballajá.

Y, según lo observado en el lugar, el nuevo jardín “le devolvió a la ciudad” plantas, insectos y aves que ahora revolotean en el área.

“Este es uno de los proyectos más completos que se han hecho en agencias de Gobierno”, agregó Rubio.

El Cuartel de Ballajá alberga una escuela de baile, una escuela de música, una editorial, el Museo de las Américas, la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española y la OECH.

De acuerdo a la página electrónica del Cuartel de Ballajá, la estructura fue construida por el ejército español entre el 1854 y el 1864, y hasta el 1898 fue utilizada como cuartel de infantería para albergar a soldados y familiares de soldados. La estructura contenía habitaciones para los oficiales y sus familias, almacenes, cocinas, comedores, calabozos y áreas para caballos.

Se indica, además, que el ejército de Estados Unidos utilizó el cuartel con fines militares hasta aproximadamente el 1939, y luego fue transformado en un hospital. El edificio fue adquirido por el gobierno de Puerto Rico en el 1976.